Desde 1996, en Colombia se celebra el Día Nacional de las Personas de la Tercera Edad y del Pensionado. Combarranquilla llevó a cabo su festival anual de Expresión Literaria con apoyo de COSCRAM, el comité organizador de actividades para el adulto mayor.
Una mañana llena de esperanza
A las 8:00 a.m., el salón de convenciones de la Unidad Boston comenzó a llenarse de voces que llegaron para festejar su día. Más de 100 participantes dieron apertura al festival de Expresión Literaria, una actividad que hace parte de Semana Cultural y Recreativa de la Persona Mayor.
Las primeras voces que se escucharon fueron las del grupo Los Bacanes de Combarranquilla, quienes, vestidos de verde y con sombreros, recitaron letanías. Con sus palabras, trajeron un ambiente de cercanía y remembranza de la época del Carnaval de Barranquilla.
Bajo el lema de la celebración “La esperanza de un mundo mejor es el motor que mueve al adulto mayor”, el Club Otoñal de Cajacopi presentó un acróstico con la palabra esperanza. Cada letra se convirtió en una manera de entender el valor del adulto mayor como promotor de la esperanza.
En el festival, la poesía tuvo su lugar para brillar a través de Mónica Gonzales Maury, Magaly Ayala, Etilia lobo y Rafael Aragón de Renacer, Comfamiliar Atlántico, Fundación Alejandrino y Comisión Arquidiocesana, respectivamente. Cada poema recitado fue una experiencia literaria única que nos mostró las dolencias y las alegrías del adulto mayor durante su vida.
Recital de alegría
A lo largo del evento, los participantes viajaron entre cuentos, décimas y chistes. Los representantes de las organizaciones asistentes levantaron su voz para contar historias que resaltaban la labor del adulto mayor. Estuvieron presentes Adultos Felices, Cajacopi, Musavica, Hospital Materno Infantil de Salamanca, Experiencia de Villate, Dinamis Club, Comfamiliar Atlántico, Fundación Alejandrino, Grupo de Adulto Mayor de Puerto Colombia, Comisión Arquidiocesana y Gobernación del Atlántico.
El festival de Expresión Literaria en la Unidad Boston fue todo un éxito. Bailes, risas contagiosas y palabras de sabiduría crearon un ambiente inolvidable que unió historias y universos. El adulto mayor es, en Colombia y en el mundo, ese puente entre la tradición y el futuro. Un símbolo del conocimiento y de un futuro mejor.
